Ex-Red Sox aplenty as Yankees and Dodgers meet in World Series
Cuando los Yankees de Nueva York y los Dodgers de Los Ángeles salgan al campo para el Juego 1 de la Serie Mundial el viernes por la noche, los fanáticos de los Medias Rojas pueden esperar ver algunas caras familiares.
El Clásico de Otoño de este año contará con cuatro ex jugadores de los Medias Rojas entre los dos equipos, además de un quinto que nunca jugó para Boston en las mayores pero que era un ex prospecto destacado.
Los Dodgers cuentan con el ex jardinero de los Medias Rojas Mookie Betts, el utilitario Kiké Hernández y los derechos Ryan Brasier y Michael Kopech, mientras que los Yankees cuentan con el recientemente canjeado jardinero Alex Verdugo.
Betts es obviamente el ex-Medias Rojas más destacado involucrado, y su presencia en la serie sin duda provocará muchos sentimientos amargos entre los fanáticos que desearían que el ex Jugador Más Valioso nunca hubiera sido canjeado.
Ahora jugando en su segunda Serie Mundial con los Dodgers y su tercera en general, Betts se perdió casi dos meses a mitad de temporada por una fractura en la muñeca, pero ha seguido siendo un contribuyente dominante en todos los aspectos cada vez que ha salido al campo. Este año, Betts obtuvo su octava nominación al Juego de Estrellas, bateó .289 con 19 jonrones y 75 carreras impulsadas en 116 juegos, y solidificó el cuadro interior mermado por las lesiones de Los Ángeles al iniciar 61 juegos como campocorto y 12 juegos en la segunda base, además de 42 juegos. partidos en su habitual jardín derecho.
Betts también está disfrutando de la mejor racha de postemporada de su carrera. Durante los primeros 11 juegos de Los Ángeles, está bateando .296 con cuatro jonrones, 12 carreras impulsadas y un OPS de 1.063.
Hernández jugó para Boston más recientemente, y pasó tres temporadas con los Medias Rojas entre 2021 y 2023 antes de regresar con los Dodgers en un acuerdo de fecha límite. Este año Hernández ha asumido un papel más de utilidad después de pasar la mayor parte de su carrera en los Medias Rojas como titular, y en 126 juegos bateó .229 con un OPS de .654 mientras jugaba en ocho posiciones defensivas para los Dodgers, incluidas cuatro apariciones como una jarra de limpieza.
Pero, como bien saben los fanáticos de los Medias Rojas, Hernández también es un jugador probado en postemporada y ha dado un paso adelante para los Dodgers nuevamente en octubre. Este otoño, Hernández apareció en nueve juegos de playoffs y bateó .303 con dos jonrones, cinco carreras impulsadas y un OPS de .863.
Brasier está ahora en su segunda temporada con los Dodgers, con quienes aterrizó después de ser cortado por los Medias Rojas a principios de 2023. El campeón de la Serie Mundial de 2018 ha encontrado una nueva oportunidad de vida desde que llegó a Los Ángeles, y aunque se perdió casi cuatro Meses este año después de sufrir una distensión en la pantorrilla, sigue siendo un elemento básico confiable del bullpen de los Dodgers. En general, registró una efectividad de 3.54 en 28 entradas, incluida una efectividad de 2.76 en 17 salidas de la temporada regular luego de su regreso de IL.
Brasier ha estado un poco más inestable en lo que va de la postemporada. En seis apariciones, ha registrado una efectividad de 5.14 en siete entradas. También inició dos juegos de playoffs como abridor.
Kopech ha atravesado un gran viaje desde sus días como uno de los mejores prospectos de los Medias Rojas. Después de ser traspasado a los Medias Blancas de Chicago como parte del intercambio de Chris Sale antes de la temporada 2017, Kopech hizo un breve cameo en las Grandes Ligas en el lado sur en 2018 antes de perderse dos temporadas consecutivas, primero debido a una cirugía Tommy John y luego debido a la pandemia de COVID-19. A su regreso en 2021, se estableció como un regular de la MLB, pero esta temporada pasó de la rotación titular al bullpen después de caminar a 91 bateadores, la peor cifra de la liga en 2023.
Finalmente aterrizó con los Dodgers antes de la fecha límite de cambios de este verano, y con el cambio de escenario parece haber finalmente realizado su inmenso potencial. Desde su llegada a Los Ángeles, ha registrado una efectividad de 1.13 en 24 salidas de la temporada regular, y en seis juegos de postemporada ha permitido solo una carrera en 5.1 entradas mientras mantiene a los bateadores contrarios en un promedio de bateo de .111.
Verdugo ha soportado una permanencia difícil en el Bronx desde que fue canjeado el invierno pasado como parte de un raro intercambio entre los Medias Rojas y los Yankees. El jardinero registró la peor temporada ofensiva de su carrera, bateando .233 con 13 jonrones, 61 carreras impulsadas y OPS de .647 en 149 juegos, y recientemente también cedió tiempo de juego al novato de los Yankees, Jasson Domínguez.
También ha bateado .194 con dos extrabases en nueve juegos de playoffs, pero se ha mantenido como un pilar en el campo en gran parte gracias a sus contribuciones en la defensa. Verdugo es finalista del Guante de Oro por segundo año consecutivo y, dadas las deficiencias de Domínguez en esa área, debería seguir siendo un habitual durante toda la Serie Mundial.
Eso significa que los fanáticos de los Medias Rojas deben prepararse para una dieta regular de referencias comerciales de Mookie Betts y Alex Verdugo, una historia irritante que se cierne sobre lo que de otro modo debería ser un choque estelar y repleto de estrellas entre dos de las franquicias más importantes del béisbol.
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