
Eran las 6:00 a.m. del 2 de agosto de 2022, cuando una llamada de un colega piloto en República Dominicana nos despertó con un tema urgente: dos mineros habían quedado atrapados en la mina de Cerros de Maimón, provincia Monseñor Noel, y se necesitaba con urgencia mover una perforadora desde Canadá para participar en el rescate.
Como capitán de una de las aerolíneas cargueras más grandes de EE. UU., recordé otras veces en las que alguien me llamaba desde República Dominicana con la urgencia de conseguir aviones cargueros para alguna misión.
Durante la pandemia recibimos varias llamadas como esta, pero los aviones de carga estaban en alta demanda, por lo que fue imposible ayudar en esa oportunidad.
- Como nos explicó el amigo geólogo Osiris De León: “La perforadora canadiense, al igual que la rozadora del Metro de SD, la pedimos en la etapa inicial del diseño del rescate minero en Cormidom, para disponer de una alternativa B al momento en que la nueva galería de rescate se acercara a la grabadora donde estaban los 2 mineros, por si acaso la roca esquistosa estaba muy alterada o fracturada y se hacía peligroso seguir avanzando el túnel de rescate con explosivos”.
Se trataba de una perforadora CUBEX 6200 de 8,165 kg de peso, y eso en sí ya representaba un gran desafío.
La mayoría de los aviones de carga comerciales tienen puertas de carga en los lados del fuselaje, lo que restringe el tamaño de la carga que puede pasar por esa puerta.
Además de la dimensión de las puertas de entrada, el peso de la perforadora era bastante elevado, y no todos los cargueros tienen la capacidad de mover tanto peso por limitación de resistencia en el piso de la aeronave.
En el mundo de aeronaves comerciales, solo los Boeing 747F fabricados originalmente como cargueros (algunos han sido convertidos en cargueros luego de agotar una vida como aviones de pasajeros), tienen puertas de carga lo suficientemente grandes para este tipo de carga especial y pisos en su bodegas de carga, y lo suficientemente fuertes para estos niveles de peso (en el caso del Boeing 747F, toda la nariz del avión se abre para dar paso a la carga de gran dimensión, mientras que en el Boeing 747 LCF, toda la cola se abre por el mismo motivo).
Esta particularidad del 747F le ayuda a mantenerse como uno de los cargueros comerciales más importantes del mundo.
Cargueros estratégicos
Del lado militar, los cargueros estratégicos (cargueros de gran tamaño con capacidad para amplio tonelaje de carga y rango de largas distancias) ofrecen una comparable capacidad con el Boeing 747F, y algunas compañías los utilizan para operaciones comerciales (tal es el caso de empresas rusas y europeas, que utilizan ex-aviones militares rusos para movimientos de carga comercial).
Estos cargueros están equipados con amplias puertas traseras para la entrada y salida de carga, y pisos fuertes para mover grandes tonelajes.
Regresando a la situación de los mineros atrapados en República Dominicana, la siguiente pregunta de mi parte fue: ¿quién pagará por el alquiler de este avión?
Arrendar un avión de esta magnitud y a último momento no es cosa barata. Los precios promedios de un vuelo chárter así rondan el medio millón de dólares, aunque durante la pandemia la demanda por este tipo de aviones era tal que, cuando hicimos las investigaciones para ayudar a mover vacunas y equipos de protección desde China, la cotización fue de US$1,500,000 con 30 días de espera.
La respuesta a esta pregunta es que no estaba claro quien pagaría de parte del Gobierno dominicano, pero que aun así debíamos iniciar las investigaciones de este tipo de aeronave y su disponibilidad.
Al recibir los datos de la perforadora, confirmamos que solo podría utilizarse un Boeing 747F o un avión carguero militar, debido a su tamaño y peso, por lo que procedimos a hacer las investigaciones con empresas cargueras norteamericanas que contasen con este tipo de aeronave.
Dada la urgencia de la situación, la aeronave debía estar disponible inmediatamente, pues debía salir hacia Canadá (estas aeronaves tienen un rango de acción global, y pueden estar en cualquier lado del planeta).
Luego de contactar diferentes cargueras norteamericanas, era obvio que se dificultaría conseguir un Boeing 747F en el tiempo especificado para ayudar en el rescate.
La siguiente idea fue buscar ayuda de gobiernos amigos que contasen con aviones militares con las dimensiones necesarias para la tarea.
Para esto, primero identificamos qué tipo de aviones tenían las capacidades para manejar las dimensiones y peso de la perforadora, y concluimos que debería ser un C-17 Globemaster o un C-5 Galaxy (aunque los Galaxy por su antigüedad tienen muy bajo nivel de listeza operacional, y la mayoría de la flota sufre de constantes problemas de mantenimiento).
Al comunicarnos con nuestros contactos en la embajada de EE. UU., estos nos informaron que investigarían con la oficina de asistencia militar, pero que recordáramos que la Real Fuerza Aérea Canadiense también contaba con C-17 Globemaster.
¡Bingo! Esa era la top idea: pedir la ayuda directamente al Gobierno de Canadá, a través de nuestra embajada en ese país y especificar que debía ser un C-17 Globemaster. Esto agilizaría la operación y reduciría el tiempo de respuesta.
Inmediatamente nos comunicamos con el Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX) de República Dominicana, y les pasamos las especificaciones del tipo de avión que debían solicitar.
El presidente Abinader, junto al ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, y la embajadora dominicana en Canadá, Michelle Cohen, participaron activamente en las comunicaciones con el Gobierno de Canadá en la solicitud de la aeronave.
El C-17 Globemaster de la Real Fuerza Aérea Canadiense aterrizó a las 10:00 p.m. del 7 de agosto en el Aeropuerto Internacional de Las Américas; dentro de su bodega de carga traía la perforadora CUBEX 6200.
Dos días después, los mineros fueron finalmente rescatados, y posteriormente, la perforadora fue regresada a Canadá por vía marítima.