FORT LAUDERDALE, Fla. – Spring Break alcanza su punto máximo a lo largo de Fort Lauderdale Beach.
Es una mezcla de fiesteros, oficiales de policía y barricadas, todo en un solo lugar festivo.
Con Miami Beach tomando grandes medidas este año para disuadir a las grandes multitudes y tomar medidas contra el caos, algunos están preocupados de que ese caos se traslade al norte el fin de semana pasado.
Hubo algunas peleas y algo de drama en Fort Lauderdale.
El alcalde de Fort Lauderdale, Dean Trantalis, dijo que no está preocupado por el desbordamiento y que la ciudad todavía está disfrutando de Spring Break.
“Verás a algunas personas venir aquí”, dijo. “No es el tipo de lugar en el que vas a ver mucho twerking en los capós de los autos y cosas así”.
Trantalis dijo que Miami Beach y Fort Lauderdale han empleado diferentes estrategias de mensajes a lo largo de los años, lo que ha llevado a cada ciudad a atraer a diferentes multitudes.
“Miami tiene una experiencia muy diferente”, dijo. “A veces me preocupa que difundir esa imagen de ‘chico malo’ no se me haya ido de las manos. Miami Beach siempre ha sido un lugar emocionante para muchas personas, pero a lo largo de los años ha sido demasiado nervioso para la multitud de Fort Lauderdale”.
En los años 80, Fort Lauderdale tomó medidas enérgicas contra ese mensaje, frenando Spring Break y impulsando una imagen familiar, pero aún así atrayendo a una multitud universitaria.
Con la afluencia de fiesteros, la policía ha intensificado las patrullas en la arena, en la calle e incluso a caballo, por si acaso.
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