En Perú, el comercio ambulatorio es una realidad evidente en cada esquina, formando parte del paisaje urbano cotidiano. Según el Centro de Investigación Empresarial (CIE), más del 71% de la población trabajaba en la informalidad en el año 2019, y entre estos emprendedores callejeros destaca la venta de huevitos de codorniz.
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Recientemente, una comerciante compartió su experiencia revelando que puede generar ingresos mensuales que superan los 6 mil soles gracias a la venta de estos pequeños huevos. Este testimonio captó la atención de los cibernautas, quienes se sorprenden ante las ganancias de un negocio aparentemente modesto.
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En un recorrido por el concurrido emporio comercial de Gamarra, el empresario colombiano Germán Mauricio Osorio se topó con Saturnina, una vendedora ambulante que cautivó su atención con su emprendimiento. La vendedora ambulante se dedica a la venta de huevitos de codorniz, un negocio que el turista define como “tan creativo”.
Según los relatos de la madre peruana, su jornada laboral comienza a las 10 de la mañana y se extiende hasta las 8:30 de la noche. Durante este tiempo, vende cinco huevitos por dos soles cada paquete, lo que resulta en un ingreso mensual de 6 mil soles.
Para llevar a cabo su negocio, la mujer adquiere los huevitos al por mayor, comprando un millar por 12 soles. Con un promedio de 800 huevitos vendidos diariamente, sus cálculos revelan una ganancia de 120 soles por cada mil huevitos. Esto se traduce en 3200 soles de ganancia por cada 8 mil huevitos vendidos, lo que le permite armar 1600 paquetes de huevitos.
El video de la entrevista a Saturnina, la vendedora ambulante de huevos de codorniz, desató una variedad de reacciones entre los espectadores. Algunos, entre risas, expresaban frases como “uno diciendo pobre señora y hoy me entero de que el pobre soy yo”, reflejando una sorpresa ante los ingresos generados por el negocio. Otros, más escépticos, cuestionaban la viabilidad del precio de compra el producto, afirmando “se equivocó la señora, imposible el millar a 12 soles” y preguntando directamente dónde se encontraba esa oferta.
La discusión sobre el costo del producto se intensificó con comentarios como “pero en el mercado venden 25 huevitos a 5 soles, que diga donde venden el millar a 12 soles para ir”. La idea de generar ganancias mensuales tan elevadas mediante la venta de huevitos de codorniz despertó la curiosidad de muchos, llevando a declaraciones como “¡6 mil soles por mes! Mañana me pongo a vender”.
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El huevo de codorniz, reconocido por sus beneficios para la salud, se destaca por su capacidad para reducir episodios de migrañas y mejorar la vitalidad ocular y de la piel, además de fortalecer el sistema nervioso, reducir el estrés y la ansiedad, según la nutricionista Nefi Mendoza, de Solidaridad Salud.
Con un contenido de vitaminas y minerales tres veces mayor que el huevo de gallina, este alimento se considera dietético y curativo, siendo rico en fósforo, calcio, hierro, potasio, zinc, magnesio, y vitaminas A, C, D, E, K, y complejo B, resaltando el contenido de B2 y B5.
A pesar de su disponibilidad en diversos puntos de venta, muchos consumidores desconocen las potencialidades nutricionales del huevo de codorniz, el cual tiene un bajo contenido de colesterol en comparación con el huevo de gallina y propiedades antialérgicas gracias a la presencia de proteína ovomucoide, fortaleciendo el sistema inmunológico. La recomendación es consumirlo de tres a cinco unidades al día, dependiendo del nivel de actividad física y del estado de salud de cada individuo, con especial atención en casos de hipercolesterolemia, donde se debe moderar el consumo de la yema y debe consultarse con un experto.
